Las personas que se desplazan a un determinado destino para practicar algún tipo de deporte u observar eventos deportivos, están ejerciendo lo que se denomina turismo deportivo.
El turismo deportivo alude a los viajes para contemplar o realizar actividades deportivas.
El turismo deportivo se clasifica principalmente en 2 tipos: fuerte y suave.
Se refiere a las personas que visitan un lugar para contemplar eventos deportivos que son competitivos, famosos y con gran número de seguidores.
Son los torneos que mayor cantidad de turistas atraen. Por tanto, en esta categoría se incluyen a todas las grandes competiciones deportivas, comprendiendo a eventos como:
La Copa Mundial de Fútbol (organizada por la FIFA).
Los Juegos Olímpicos (organizado por el Comité Olímpico Internacional).
Super Bowl (organizado por la National Football League o NFL).
Finales de la Liga de Campeones (llevada a cabo por la UEFA).
Finales de la NBA (por la National Basketball Association).
La forma de participar de los turistas es haciendo presencia en los estadios, contemplar los juegos, y/o apoyar a su equipo de preferencia.
Hace referencia a las personas que viajan para participar en actividades deportivas de forma recreativa. En esta modalidad, el turista tiene una implicación más activa, ya que su visita está motivada principalmente para practicar algún deporte. Entre ellos, se encuentra:
El turismo de deporte puede ser activo (participar en una actividad deportiva) o pasivo (contemplar un espectáculo deportivo).
Los eventos deportivos a gran escala son capaces de movilizar a un gran número de personas alrededor del mundo.
Los espectáculos deportivos que más turistas atraen son la Copa Mundial de Fútbol y los Juegos Olímpicos, eventos que se celebran cada 4 años.
Existen partidos individuales que resultan de gran atracción por la rivalidad entre 2 equipos, y no por la competición en sí, como, por ejemplo, el clásico español, en el que se enfrentan el Real Madrid Club de Fútbol y el Fútbol Club Barcelona.
Deportes acuáticos: Natación, Surf, Remo, Kitesurf, Bodyboarding, Motonáutica, Esquí acuático, Wakeboarding, Windsurf y Rafting.
Deportes aéreos: Paracaidismo, Aeromodelismo, Ala delta, Vuelo sin motor, Parapente y Paravelismo.
Deportes de montaña: Senderismo, Escalada, Montañismo, Ciclismo de montaña, Excursionismo, Rápel, Escalada en bloque y Escalada libre.
Deportes clásicos: Fútbol, Baloncesto, Béisbol, Tenis, Hockey, Boxeo, Pádel, Balonmano, Cricket, Golf, Fútbol sala, Esquí, Tenis de mesa y Voleibol.
Visitar y observar eventos deportivos: Son las actividades que motivan a la gran mayoría de los turistas, sobre todo cuando algún evento de relevancia está por celebrarse. Consiste en trasladarse a un lugar en concreto y presenciar en vivo un espectáculo de interés para la persona.
El turismo de deporte moviliza a millones de personas alrededor del mundo, siendo un factor importante en la economía de muchos países. A través de ello, la infraestructura del núcleo turístico mejora, se crean nuevos empleos y la actividad comercial aumenta.
Además, motiva a que los diversos destinos turísticos creen nuevas formas de negocio para no depender únicamente del deporte, diversificando así su producto y ofreciendo otras alternativas que resulten de interés para los turistas.
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