20 Habilidades para poner en tu Currículum Vitae

El apartado de habilidades es una de las secciones más importantes en un currículum vitae, ya que permite a los reclutadores ver de inmediato qué capacidades tienes y cómo pueden estas aportar al puesto al que aspiras.

Este apartado funciona, por tanto, como una especie de resumen práctico de tus competencias al ayudar a los empleadores a evaluar si encajas o no con las necesidades del puesto sin necesidad de leer toda tu experiencia laboral.

Por eso, esta parte de tu CV debe estar bien estructurada, ser clara y contener únicamente aquellas habilidades que realmente aporten valor a tu candidatura.

3 errores que muchos cometen al armar su apartado de habilidades en un CV

Antes de sumergirnos en las habilidades que debes destacar en tu currículum, primero es crucial abordar los errores comunes que muchos candidatos cometen al construir esta sección:

1. Mencionar habilidades que no tienen relación con el puesto de trabajo

El primer error típico es incluir habilidades que no tienen ninguna relación con el puesto al que se postula. Muchas personas, en un intento desacertado de llenar esta sección, terminan agregando competencias que, si bien pueden ser útiles en otros contextos, no aportan valor al empleo objetivo.

Numerosos candidatos no saben exactamente qué habilidades buscan los reclutadores para un puesto y creen que mientras más pongan, mejor. Pero realmente no es así, ya que mucha información irrelevante puede jugar en contra del aspirante.

Hay que tener en cuenta una cosa: los reclutadores por lo general dedican pocos segundos a revisar cada cv, y si encuentran una lista de habilidades poco o nada relacionadas con el puesto, es muy posible que pierdan el interés rápidamente.

Por otro lado, están quienes caen en este error por una estrategia mal planteada. El querer demostrar versatilidad o gran amplitud de conocimientos hará que, en lugar de causar una buena impresión, el reclutador pierda el enfoque, ya que realmente el CV es poco efectivo.

Por ello, antes de agregar una habilidad, es súper importante revisar la descripción del puesto y analizar qué competencias son realmente necesarias. Así, si una habilidad no contribuye directamente al desempeño en el cargo, es mejor dejarla fuera y priorizar aquellas que, en efecto, sí sumen valor a la candidatura.

2. Incluir demasiadas habilidades

Otro error bastante común es llenar el apartado de habilidades con una lista muy extensa. Muchos solicitantes creen que, al mencionar la mayor cantidad posible de competencias, aumentan sus oportunidades de ser seleccionados. Esto, sin embargo, puede tener el efecto contrario, pues un exceso de información hace que el reclutador la tenga más difícil para encontrar de forma rápida y sencilla aquellas habilidades que realmente importan para el trabajo. De hecho, algunos ni siquiera se molestarán en leer la lista completa, porque un apartado así puede dar la sensación (muchas veces acertada) de que el postulante está inflando artificialmente su perfil.

Por ende, la clave está en el equilibrio: no colocar muy pocas pero tampoco demasiadas. Un número correcto podría situarse entre 5 y 10 habilidades.

3. Mentir

Mentir sobre tus habilidades no es una buena estrategia y puede traerte más problemas que cosas buenas. Primero, puedes quedar expuesto rápidamente si en la entrevista te piden demostrar una habilidad que no tienes.

Segundo, muchos subestiman la destreza de los reclutadores para detectar mentiras o exageraciones. Debemos recordar que estos profesionales están específicamente entrenados para seleccionar y contratar, por lo que suelen ser muy precisos para detectar cuándo un candidato está inflando su perfil. Además, si has conseguido llamar la atención del reclutante, es altamente probable que te sometan a pruebas o te hagan preguntas técnicas para comprobar si lo que dices en tu CV es 100% verdad.

Tercero, si por la razón que sea logras que te contraten, tarde o temprano deberás enfrentar la situación en la que tengas que demostrar esa habilidad que no posees, en cuyo caso podrías perder tu empleo y dañar tu reputación como profesional. Pero incluso si no te “atrapan”, y estamos hablando de una habilidad importante que se usa en el día a día, terminarás trabajando bajo una enorme presión y un constante estrés.

¿Qué hacer en lugar de mentir? Venderte bien, que no es lo mismo. Una cosa es destacar lo mejor de tu perfil y otra es inventar o inflar tus habilidades. Para ello, es importante que aprendas a resaltar tus fortalezas y presentarlas de la manera más atractiva posible, dentro de la realidad.

Tipos de habilidades para un currículum vitae

En un currículum vitae se añaden principalmente dos grupos de habilidades: hard skills y soft skills.

1. Hard skills (habilidades duras): son aquellas que te permiten realizar con éxito un trabajo en específico. Son fácilmente medibles y se adquieren a través de la formación y la experiencia. Cada puesto de trabajo requiere un conjunto de habilidades diferentes. Por ejemplo, el dominio de un determinado idioma es una hard skill.
2. Soft skills (habilidades blandas): son aquellas habilidades personales y sociales que te permiten interactuar efectivamente con los demás en un entorno laboral. Son más difíciles de medir que las hard skills y a menudo se desarrollan a través de la experiencia y la interacción social en el día a día. Un ejemplo común de soft skill es el liderazgo.

Como verás, es importante incluir una combinación equilibrada de ambas en tu currículum. Las hard skills indican tu capacidad técnica para desempeñar el puesto, en tanto que las soft skills reflejan cómo te relacionas con los demás y te adaptas al entorno de trabajo.

20 habilidades para poner en tu currículum vitae

Antes de empezar a recomendarte qué habilidades colocar en tu CV, quiero que tengas en cuenta que no existe una lista universal de habilidades que funcione para todos los casos. La elección de qué competencias incluir dependerá del puesto al que aspiras, del sector en el que trabajas y, por supuesto, de tus propias capacidades. De todas formas, hay ciertas habilidades que son muy valoradas por los empleadores en prácticamente cualquier ámbito laboral, las cuales te presento a continuación:

1. Habilidad para comunicar ideas con claridad

Las empresas funcionan a base de comunicación: correos, reuniones, informes, presentaciones, etc. Por lo tanto, saber expresarse efectivamente es una habilidad que siempre será valorada en cualquier organización.

2. Trabajo en equipo

A menos que trabajes completamente solo (lo cual es raro), siempre necesitarás coordinarte con otros para realizar cualquier tipo de actividad grupal o sacar un proyecto adelante. Con lo cual, si realmente sabes trabajar en equipo y lo puedes respaldar en tu CV, sin duda tendrás más chances de destacar.

3. Facilidad para adaptarse a cambios

El mundo laboral cambia más rápido de lo que crees, y si eres de los que se resisten a cualquier novedad, deberías trabajar para cambiarlo, ya que las empresas evolucionan constantemente, y precisan por tanto que sus integrantes también lo hagan.

Si en tu CV muestras que no te asustan los cambios y que te ajustas sin dramas, los reclutadores verán en ti a alguien flexible y preparado para lo que venga.

4. Dominio de un segundo idioma (especialmente inglés)

No es ningún secreto: saber otro idioma (particularmente inglés) te abre muchas puertas. Sin embargo, si sabes un segundo idioma que no es el inglés, no te preocupes, porque también puede ser una habilidad bastante atractiva dependiendo del sector y la empresa en la que estés interesado.

En todo caso, dominar una segunda lengua (sea cual sea) siempre es visto como algo positivo en un CV.

5. Empatía

Además de buenos trabajadores a nivel técnico, las empresas quieren dentro de sus equipos personas con las que sea agradable trabajar.

Quizá no sea una cualidad que muchos incluyan en su currículum, pero la empatía es una habilidad muy apreciada, sobre todo en aquellos puestos de trabajo donde la interacción con otras personas es constante.

6. Atención al detalle

Tener atención al detalle es una destreza útil en prácticamente cualquier trabajo. ¿Qué empresa no desea una persona capaz de detectar rápidamente errores y asegurarse de que todo esté bien hecho?

Si eres alguien que revisa su trabajo minuciosamente y garantiza que cada tarea se ejecute con la precisión justa, entonces tienes una habilidad muy valiosa y deberías plasmarla en tu hoja de vida.

7. Gestión eficiente del tiempo

Las tareas no se hacen solas y el tiempo tampoco se estira. Si sabes organizarte bien, priorizar lo que importa y cumplir con lo que se te pide, serás indudablemente un trabajador valioso en cualquier organización.

En un CV, esta habilidad le dice al reclutador que puede confiar en ti para que el trabajo salga sin retrasos ni excusas.

8. Creatividad

La creatividad no es solo para los artistas. Tener ideas frescas y buscar nuevas formas de hacer las cosas es útil en prácticamente cualquier industria. Empresas de todo tipo valoran a quienes pueden pensar fuera de lo común y encontrar soluciones que a nadie más se le habría ocurrido.

Si lo incluyes en tu CV estarás mostrando que puedes aportar algo diferente, lo cual muchas veces es necesario y las empresas lo saben.

9. Redacción profesional

Cualquiera puede redactar, pero hacerlo con estructura, sin errores ortográficos, y que se entienda lo que se busca transmitir, es otra historia. La capacidad de escribir sin ambigüedades es una habilidad que las entidades del mundo valoran positivamente. Por ende, si la redacción es una habilidad que se te da bien, asegúrate de resaltarlo en tu CV.

10. Buen manejo del estrés

No muchos pueden desenvolverse efectivamente bajo estrés en la esfera laboral. Y esto, las empresas lo saben más que nadie. Por tanto, cuando detectan a alguien capaz de rendir a un alto nivel incluso en situaciones estresantes, lo consideran un gran activo para el equipo.

Así, si en tu experiencia laboral has trabajado en entornos de alta presión y has sabido responder con eficiencia, no dudes en mencionarlo dentro de tu currículum.

11. Proactividad

En un CV, esta habilidad dice: “no necesito que me digan cada paso, sé moverme por mi cuenta”.

Esperar instrucciones todo el tiempo no es la mejor estrategia, por lo que tomar la iniciativa y solventar problemas sin que te lo pidan demuestra que puedes aportar mucho a una empresa.

12. Escucha activa

Escuchar bien es tan importante como hablar bien. Entender lo que te dicen, hacer preguntas y captar todo tipo de detalles dentro de una comunicación verbal ayuda a que todo funcione mejor en el trabajo, dado que la escucha activa permite interpretar la intención detrás de lo que se dice.

Al incluir esta competencia en tu currículum podrías mostrar a priori que puedes comunicarte de manera efectiva y trabajar bien con los demás.

13. Conocimientos en paquetes de ofimática

Excel, Word, PowerPoint… Los uses mucho o poco, estas herramientas están en casi todos los trabajos y, en muchísimos cargos, saber manejarlas bien te hace mucho más eficiente y evita, por ende, que pierdas tiempo en tareas que son simples.

En ciertos roles no está de más que integres esta habilidad en tu currículum, ya que estarás mostrando conocimientos básicos que ese puesto en particular valora.

14. Tolerancia a la frustración

Las cosas no siempre salen como queremos, pero seguir adelante a pesar de las adversidades es clave en cualquier empleo. De manera que, si eres capaz de convencer a la empresa contratante que puedes manejar los retos con buena actitud, aumentarás tus chances de que quiera tenerte en su equipo.

15. Autoaprendizaje

No esperar a que te enseñen todo y tener la iniciativa de aprender por cuenta propia es algo tremendamente valorado en cualquier empresa. Investigar, estudiar y actualizarse constantemente es indispensable para permanecer competitivo en el mundo de hoy.

Recuerda, el mercado laboral es dinámico, y mantenerse relevante es algo que las empresas siempre querrán de ti.

16. Toma de decisiones bajo presión

No siempre hay tiempo para pensar demasiado, y a veces toca actuar rápido y con seguridad, de modo que tomar decisiones acertadas en poco tiempo es una habilidad que cualquier empresa va a agradecer.

Si en el pasado has logrado tomar buenas decisiones estando bajo presión, no titubees en añadirlo en tu CV.

17. Mentalidad de crecimiento

No quedarse en lo básico, sino más bien buscar mejorar constantemente es una actitud que muchos reclutadores aprecian, ya que quienes aprenden de sus errores y buscan evolucionar, suelen progresar más rápidamente en sus carreras. En consecuencia, si mencionas esta habilidad en tu hoja de vida, estarás afirmando que eres alguien que no se conforma y que siempre está buscando crecer profesionalmente.

Ojo, no debemos confundir esta habilidad con el autoaprendizaje (que es la capacidad de aprender por cuenta propia). La mentalidad de crecimiento es una forma de pensar en la que crees enérgicamente que siempre puedes mejorar con esfuerzo y aprendizaje, y en la que, además, no te limitas por lo que no sabes o por los errores que cometes, sino que ves todo lo que te obstaculiza como oportunidades para crecer.

18. Apertura a críticas constructivas

Quienes pueden aceptar sugerencias sin tomárselas a mal logran desarrollarse más rápido. Si lo pones en tu CV, relevarás que eres alguien abierto a mejorar y con una actitud profesional.

19. Inteligencia cultural

Hoy en día es muy común trabajar con personas de diferentes países y culturas. Por lo que si estás apuntando a un rol que implique relacionarse con compañeros o clientes de diferentes partes del mundo, entonces esta habilidad debería ser muy relevante para el puesto y, por tanto, para tu currículum.

20. Capacidad de improvisación

En el mundo laboral, por mucho que planees todo al detalle, siempre habrá imprevistos. Si eres bueno improvisando, quiere decir que puedes reaccionar con calma, usar apropiadamente los recursos que tienes en el momento y tomar decisiones sin paralizarte.

En este sentido, si en tu CV das a entender que tienes esta habilidad, los reclutadores verán que eres alguien que no se bloquea ante lo inesperado y que puede mantener el ritmo de trabajo sin depender de que todo salga perfecto.

Como habrás podido notar, la mayoría de las habilidades que recomendamos son del tipo “soft skills”, ya que estas generalmente son valiosas en cualquier ámbito o puesto de trabajo.

Por otro lado, no hemos incluido casi hard skills porque estas sí que dependen mucho del sector y el puesto específico al que estás postulando.

Evidentemente, esto no quiere decir que en cada postulación debas incluir todas las habilidades que aquí se describen, sino que debes seleccionar aquellas que verdaderamente representen tus fortalezas y que sean relevantes para el puesto.

Es decir, no únicamente las hard skills deben ser adaptadas a cada postulación, sino también las soft skills.

Te deseamos mucha suerte en tu búsqueda de empleo y, recuerda, una de las mejores formas de mejorar tu currículum es con cursos, másters y otras formaciones online específicas.