El marketing de hotel es el arte de convertir la hospitalidad en una experiencia comercialmente exitosa. Se trata de una herramienta estratégica vital para la gestión eficaz de la oferta hotelera en un entorno de alta competencia.
El marketing hotelero es un segmento del marketing que busca convertir la visión estratégica de un hotel en acciones concretas que generen resultados tangibles, tanto en términos de ocupación como de satisfacción del cliente.
Podemos decir que es un subcampo focalizado a las necesidades únicas de la industria hotelera. Así, integra todo un conjunto de acciones destinadas a la comercialización y promoción de un hotel, con el fin de generar demanda, maximizar los ingresos, y mejorar la experiencia del huésped.
Conseguir que las habitaciones estén llenas durante el mayor tiempo pasible
Expandir la base de clientes
Transmitir los valores únicos del hotel
Incrementar la visibilidad online
Mejorar la tasa de conversión
Evaluar constantemente el rendimiento de las estrategias aplicadas
Mejorar la satisfacción del cliente post-estancia
Promover servicios complementarios
El marketing de hoteles comprende, entre otras estrategias: SEO local, marketing de contenidos, redes sociales, programas de fidelización, colaboración con influencers, publicidad pagada, y remarketing.
El marketing hotelero no es algo exclusivo de las grandes cadenas hoteleras, sino que también es útil para hoteles más pequeños. Por ejemplo: pequeñas posadas, casas rurales, y hostales boutique.
Este tipo de marketing se divide en dos canales principales: el tradicional y el digital. El tradicional incluye anuncios en revistas de viajes, folletos en puntos turísticos locales, y carteles en lugares estratégicos, así como compra de espacios publicitarios en periódicos locales, estaciones de radio y televisión. Por otro lado, el digital incluye RR.SS., SEO, SEM, email marketing, creación de contenido en blogs, gestión de sitios webs, etc.
Un objetivo fundamental del marketing de hoteles es fortalecer la posición del hotel en el mercado, de tal manera que sea reconocido, valorado y preferido por los clientes frente a la competencia.
Este marketing no únicamente se centra la promoción del hotel, sino que también busca la mejora de diversos aspectos internos del hotel para incrementar la satisfacción del cliente durante toda su estadía. Por lo que, en cierta parte, también se preocupa de aspectos como la calidad del servicio, las instalaciones, y la atención al cliente.
Como en cualquier sector, para que una estrategia de marketing hotelera sea realmente efectiva, es fundamental que la empresa hotelera conozca a profundidad a su cliente potencial. Solo así podrá ofrecer promociones que llamen la atención, y servicios que satisfagan las necesidades de su público objetivo. Por ejemplo, no es lo mismo el público de un hotel boutique de lujo en una zona exclusiva de la ciudad que el de un hotel familiar cerca de un parque temático. El primero está orientado a personas con alto poder adquisitivo que buscan exclusividad. Y el segundo está dirigido a familias con niños que buscan comodidad, entretenimiento y facilidades para su estadía.
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