El conflicto es un enfrentamiento abierto entre las partes que resulta de sus intereses y opiniones mutuamente incompatibles.
La palabra conflicto viene del latín y significa choque. Un conflicto se entiende como un enfrentamiento, una lucha entre partes, una diferencia de opinión.
Un conflicto es una situación en la que los implicados perciben una problemática, aunque no la sea. Dicho de otro modo, es una valoración subjetiva de la situación por parte de los implicados en el conflicto. Para ello, los actores se esfuerzan por alcanzar cualquiera de sus objetivos, utilizando cualquier medio para lograrlo.
Algunos especialistas consideran que el conflicto es un proceso entre las personas en el curso de su comunicación e interacción con los demás. El conflicto puede surgir tanto entre dos individuos, como entre un grupo de individuos, incluso entre los que están unidos por características esenciales, por ejemplo, el conflicto entre los partidos no es raro. Los participantes de estos colectivos tienen motivos, intereses y objetivos diferentes, por lo que entran en conflicto. Al mismo tiempo, el conflicto es una de las condiciones necesarias para la existencia de la organización. A pesar de que los científicos reconocen una serie de consecuencias negativas de los conflictos, en general, reconocen que son los conflictos los que contribuyen al desarrollo de la sociedad.
En la actualidad, la conflictología es una ciencia aplicada; estudia los conflictos desde una perspectiva filosófica y sociológica. La conflictología es de especial interés para los directivos, que se interesan por las cuestiones de gestión de conflictos en los equipos. Los psicólogos se interesan por los conflictos individuales-psicológicos, es decir, los conflictos intrapersonales, etc.
La clasificación de conflictos desempeña un papel importante en términos de metodología. Así es como se sistematiza el conocimiento en el campo de los estudios sobre conflictos y también cómo se pueden obtener nuevos conocimientos a través de la sistematización. Los intentos de analizar los conflictos existentes también suelen reflejar el punto de vista subjetivo de un experto en concreto que estudia dicha cuestión.
Una clasificación general de los conflictos está formada por cuatro grupos:
Los conflictos pueden ser constructivos o destructivos en cuanto a su impacto en el rendimiento del grupo o de la organización.
Los conflictos constructivos o funcionales son aquellos que conllevan a una toma de decisiones informada y favorecen el desarrollo de las relaciones entre los actores del conflicto.
Los conflictos destructivos o disfuncionales son aquellos que complican la toma de decisiones oportunas, así como la relación entre las partes del conflicto.
Estos conflictos pueden ser reales o irreales.
Los conflictos reales son los que causan descontento con las condiciones concretas, un reparto injusto, determinados beneficios entre los participantes. En general estos conflictos tienen como objetivo lograr un resultado determinado.
Los conflictos irreales son los que tienen como propósito la expresión concreta de emociones negativas, hostilidad o resentimiento, es decir, el conflicto es el objetivo principal.
Aquí el conflicto se tipifica en intrapersonal, interpersonal, entre persona y grupo e intergrupal
El conflicto intrapersonal se produce cuando hay desarmonía entre varios factores psicológicos del mundo interior de una persona, como sentimientos, valores, motivaciones, necesidades, etc.
El conflicto interpersonal es el más común. Este puede manifestarse de diferentes formas y en distintas situaciones. Pero las causas de ese conflicto no sólo pueden ser las diferencias de comportamiento, modales, actitudes, opiniones o caracteres de las personas, las cuales son causas no sólo subjetivas sino también objetivas, pero que en la mayoría de los casos están en la raíz de los conflictos interpersonales.
El conflicto entre persona y grupo, que surge cuando un miembro de un grupo u organización viola las normas de comportamiento establecidas por el grupo u organización, o las leyes de comunicación aceptadas en los grupos informales.
El conflicto intergrupal es aquél que tiene lugar entre grupos formales y/o informales que integran una sociedad u organización. Resulta interesante que, durante un conflicto intergrupal, las personas puedan reunirse en varias comunidades cohesionadas. Sin embargo, esta cohesión suele desaparecer en cuanto se consigue el resultado deseado.
En función de las características de las partes enfrentadas y de las condiciones de desarrollo, los conflictos suelen ser internos, externos y antagónicos.
Los conflictos internos: se caracterizan por la interacción de dos o más actores opuestos dentro de una comunidad o grupo de personas.
Los conflictos externos: se trata de la interacción de opuestos pertenecientes a entidades diferentes (grupos, clases, etc.).
Los conflictos antagónicos: se encuentran entre los más intensos, ya que representan la interacción entre grupos sociales irreconciliablemente opuestos. El concepto de antagonismo es muy común en medicina y biología: puede haber antagonismo de dientes, músculos, microbios, fármacos, venenos, etc. Además, en matemáticas, el antagonismo se considera lo contrario al interés. En su forma más pura, el antagonismo se da en los procesos sociales.
A todo lo anterior hay que añadir que una correcta comprensión e interpretación de los conflictos, así como de sus funciones, características, esencia y consecuencias es imposible sin la clasificación de los mismos, para luego analizarlos y sacar provecho de lo acontecido en medio del conflicto.
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