En ocasiones, para asegurar que un producto turístico de a conocer todas sus virtudes, es necesario utilizar lo que se conoce como animación turística.
Este concepto alude a las acciones que se destinan sobre los turistas para animar, entretener y fomentar las relaciones sociales para garantizar una buena experiencia a los usuarios presentes.
La animación turística se refiere al conjunto de actividades que se realizan sobre un individuo o grupo de personas para estimular su participación turística e involucrarlos más en sus vacaciones.
El objetivo es incrementar el goce recreativo del turista, haciendo que su momento vacacional sea más divertido y participativo.
El perfil responsable en llevar a cabo estas acciones es el animador turístico. Un animador turístico es un profesional que planifica, organiza y ejecuta acciones de animación vacacional de índole recreacional, cultural y deportivo en diversos escenarios para conseguir que los turistas pasen un momento agradable.
Animación turística activa: Es aquella animación en donde el turista se involucra en la actividad de manera activa. Por ejemplo, participar en juegos deportivos, bailar en un escenario, interpretar un personaje en una obra de teatro, etc.
Animación turística pasiva: Consiste en participar pasivamente en una actividad. Por ejemplo, mirar una obra de teatro, ver desde las gradas un partido deportivo, contemplar los artefactos de un museo, escuchar a un artista cantar, etc.
Son acciones llevadas realizadas por profesionales capaces de ofrecer experiencias agradables a los turistas. Estos animadores son enérgicos, motivantes, buenos comunicadores, divertidos, con grandes conocimientos de la zona turística, poseen carisma y son educados.
Las actividades varían de acuerdo a la edad de los turistas (niños, adolescentes, adultos y ancianos) y el lugar en el que se encuentren (hoteles, piscinas, playas, montañas, cruceros, etc.).
Son eventos que se caracterizan por promover la participación, activa o pasiva, de los turistas, con el objetivo de integrarlos en el destino turístico.
Es una manera de aprovechar el tiempo vacacional al máximo, sobre todo para aquellos usuarios que tengan más dificultades en encontrar pasatiempos interesantes en el sitio turístico. En pocas palabras, exprime las virtudes que ofrece un determinado producto turístico.
La importancia de la animación turística radica en potenciar las cualidades que un producto turístico tiene para ofrecer, asegurando que los turistas aprovechen al máximo su tiempo de estadía mientras experimentan momentos de gran disfrute.
Estas acciones procuran dejar una buena imagen del lugar, motivando a los turistas a volver a visitar dicho destino o que recomienden el sitio a otros viajantes. Esto es, fomenta la fidelización de los clientes.
La animación turística es una fuente importante de ocio y entretenimiento, y está más que demostrado que los clientes consideran cada vez más este servicio a la hora de decidirse por un destino turístico, lo cual recalca su valor.
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