La agricultura orgánica (agricultura natural, orgánica o biológica) es un método agrícola que elimina el uso de pesticidas, herbicidas, fertilizantes químicos, varios reguladores del crecimiento de las plantas, así como semillas genéticamente modificadas.
La agricultura orgánica se basa en el concepto de desarrollo sostenible, que está integrado en el ecosistema existente, no viola su funcionamiento armonioso, preserva la naturaleza y proporciona a la población alimentos de calidad.
La agricultura orgánica se lleva a cabo sobre la base de los estándares IFOAM, el monitoreo de la tierra, así como el control de MPC de sustancias nocivas en los productos. El cumplimiento de las regulaciones y el control estricto se produce en todas las etapas del proceso de producción.
Orgánico, bio o ecológicos: un producto limpio y seguro. Los 3 términos se usan en la práctica. Dichos productos se cultivan, procesan, certifican y venden de acuerdo con las normas de producción orgánica.
Los productos de agricultura orgánica se cultivan sin el uso de agroquímicos, pesticidas, fertilizantes minerales, organismos genéticamente modificados, antibióticos, estimulantes del crecimiento. Estas sustancias son peligrosas para la salud humana y amenazan el medio ambiente.
Dichos productos se procesan sin el uso de gases, ceras sintéticas, aditivos químicos para mejorar el sabor o extender la vida útil.
El embalaje ecológico tiene un impacto mínimo negativo en el medio ambiente.
Vale la pena señalar que el producto orgánico no es una invención del hombre moderno. Las condiciones para crear tales productos son simples: maduración natural a través del sol, agua y cuidado ecológico. Nuestros antepasados se dedicaron a la misma agricultura hace cientos de años. Sin embargo, en la búsqueda de un alto rendimiento, las personas comenzaron a usar productos químicos y otros aditivos que afectan negativamente la calidad del producto, nuestra salud y el medio ambiente.
La agricultura industrial agota los suelos que no pueden dar a las plantas el valor nutricional necesario. El resultado es una mala calidad del producto.
Los estudios demuestran que el contenido de nitratos, metales pesados y otras sustancias nocivas en los productos orgánicos es mucho menor que en los ordinarios. Pero la presencia de importantes nutrientes y antioxidantes, por el contrario, es mayor. Los productos orgánicos no son transgénicos y tampoco están hechos de sustancias genéticamente modificadas.
Los cereales orgánicos contienen un promedio de 10 - 50% más de vitaminas, minerales, antioxidantes y otras sustancias beneficiosas en comparación con los productos industriales. Tal alimento fortalece la inmunidad humana, ayuda a mantener la belleza y la salud.
Los alimentos orgánicos son la opción correcta para las personas que comen alimentos saludables y se preocupan por la calidad nutricional de su familia. Dichos productos contienen las vitaminas y minerales necesarios, que el cuerpo absorbe fácilmente, a diferencia de los suplementos dietéticos sintéticos.
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