La estrategia de desarrollo empresarial es más que un modelo de negocio de éxito que te permite operar de forma estable y sobrevivir en tu nicho. Una estrategia empresarial competitiva es una cuestión de rentabilidad óptima de la empresa a largo plazo.
Se puede llamar estrategia a cualquier plan o programa. Pero para una empresa, una estrategia de desarrollo óptima es un plan que debe llevar a la empresa a ser eficiente económicamente.
La estrategia de desarrollo empresarial no puede considerarse al margen de los conceptos de beneficio y eficiencia.
Hay muchas definiciones de estrategia empresarial:
¿Cómo se consigue el máximo rendimiento?
En primer lugar, de la capacidad de una empresa para crear un valor único en su sector, en su nicho, frente a la competencia. Y esta es la forma de posicionarse de forma única y distinguirse de los competidores.
En segundo lugar, de los métodos y acciones a través de los cuales la empresa crea un valor único en su nicho. Y se trata de la eficacia de los procesos empresariales de su cadena de valor a través de los cuales crea un valor único.
Analicemos ahora cómo conformar una estrategia de desarrollo empresarial en estas dos áreas.
¿Qué es la competencia? ¿Y cómo ganar en el medio competitivo?
La mayoría de las empresas en competencia eligen la estrategia de ser el mejor en su nicho y se ponen como objetivo ganar a toda costa, destruyendo a los competidores. En este tipo de empresas, la atención se centra en el cumplimiento de los planes y la consecución de los objetivos: volumen de ventas, márgenes, beneficios con respecto al espacio, etc.
Si todas las empresas del sector optan por la estrategia empresarial de ser el mejor, se producirá inevitablemente una confrontación. Todas las compañías buscan los mismos clientes, copiando las acciones de los demás, socavando los beneficios en un conflicto de precios y, como resultado, convirtiéndose en lo mismo.
Por lo que, el cliente tiene que elegir basándose únicamente en el precio.
El hecho de diferenciarse de un competidor con descuentos no significa que se logre ganar a toda costa. Estás en un camino de destrucción mutua garantizada.
En el sector de la industria los beneficios se erosionan, las empresas sobreviven, y no tienen energía para crecer.
La estrategia óptima para el desarrollo del negocio será elegir un camino diferente al de tus competidores.
La esencia de una estrategia de desarrollo empresarial verdaderamente competitiva y eficaz es crear un valor único.
El mercado responde a ello haciendo crecer su público objetivo. Todo ello, en consecuencia, da lugar a un resultado positivo.
La esencia de la competencia no es ganar el pulso de las ventas. Se trata de generar beneficios fijos.
Los beneficios de un sector dependen de muchos factores: numerosos actores compiten por ellos.
La competencia es esencialmente una lucha por el beneficio. No tiene sentido enorgullecerse del tamaño o del rápido crecimiento de su empresa si no es rentable. El objetivo de la competencia es obtener beneficios, y no solo la participación en el mercado.
Los beneficios de una industria son creados por las 5 fuerzas que la configuran.
Para entender cuál debe ser la estrategia de beneficios de tu sector, tienes que comprender cuáles son esas fuerzas. También qué riesgos y amenazas suponen.
La teoría de las 5 fuerzas industriales fue desarrollada por M. Porter en 1985. Las fuerzas que influyen y compiten por la rentabilidad de la industria son:
Una estrategia de desarrollo empresarial sólo será eficaz si tiene en cuenta los riesgos que plantean estas 5 fuerzas: la intensidad de la competencia entre los competidores existentes, la importancia de los consumidores, la influencia de los proveedores, la amenaza de los sustitutos y la intimidación de los competidores recién llegados.
Lo que es importante recordar sobre la relación entre la estructura de una industria y su capacidad de generar beneficios:
Si está formulando una estrategia de desarrollo empresarial es necesario realizar un análisis de las 5 fuerzas, con el fin de identificar aquello que puede limitar o crear oportunidades estratégicas para el negocio.
Este análisis se realiza a través de una sesión de planificación estratégica cuando se desarrolla una estrategia empresarial.
Una estrategia de desarrollo empresarial además de favorecer un negocio de ejecución estable y mantener un nicho, también tiene en cuenta los beneficios que la organización pueda obtener. El propósito de la estrategia es crear un valor único estable y esto se consigue analizando las 5 fuerzas que le conforman.
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