5 razones para estudiar un Máster en Educación y Docencia

Aquellos que deciden estudiar un Máster en Educación y Docencia pueden ser considerados como los ‘profesores del futuro’. Especializarse y seguir avanzando en una carrera es, precisamente, lo que marca la diferencia entre los profesionales del sector educativo. 

¿Por qué estudiar un Máster en Educación y Docencia?

Estudiar una maestría en educación es lo que necesitas si te dedicas a la enseñanza. Hoy en día existen grandes retos a sortear en el ámbito educativo. Los profesionales que adquieren conocimientos complementarios son los que pueden destacar en una institución o comunidad educativa. ¿Por qué? Porque cuentan con más herramientas que sus colegas.

Es muy importante estar preparado para los cambios que se avecinan, pero también para los que ya han sucedido. Al estudiar un Máster en Educación y Docencia, tu carrera profesional dará un giro de 180°. Presta atención a estos motivos para elegir la especialización:

1. Mejorarás métodos de enseñanza

Para tener éxito profesional es fundamental mejorar continuamente. Cuando conoces los principales fundamentos psicológicos y pedagógicos del proceso educativo tendrás más confianza para desarrollar tus funciones de profesor. Y también es importante dominar nuevas herramientas y estrategias de enseñanza. Esto se traduce en más destrezas en el aula y un impacto superior en los alumnos.

2. Aumentarás tu salario

Con un Máster en Educación y Docencia tienes la posibilidad de postular a puestos de trabajo vacantes que implican mayores niveles de responsabilidad y tareas. Esto se traduce en un mayor salario. Muchas instituciones educativas solicitan a sus profesores que cuenten con licenciaturas, postgrados o maestrías para contratarlos.

3. Incidirás en planes de enseñanza

En la actualidad, los encargados de crear planes curriculares y programas de enseñanza son aquellos profesores con cierta experiencia y titulación. Por lo tanto, con un Máster en Educación y Docencia podrás embarcarte en diferentes proyectos y podrás participar activamente en la creación de planes de estudio y estrategias de gestión educativa. Además, tendrás la capacidad y las herramientas para evaluar los resultados de dichos cambios en los temarios.

4. Enriquecerás tu labor en el aula

La tecnología va de la mano de la educación (y viceversa). Los profesores han debido modernizarse para que sus clases sean más acordes a los tiempos actuales. Un Máster en Educación y Docencia te permitirá disponer de estas herramientas y ponerlas en práctica tus clases. Es decir, que estarás más capacitado para formar a tus alumnos.

5. Estarás más preparado para los cambios

Nadie puede negar que una persona formada es la que está mejor preparada para afrontar los retos que se le presentan. En el ámbito de la enseñanza los desafíos están a la orden del día. Y lo mejor de todo es que te sentirás confiado como para hacerles frente e influir de manera positiva en el proceso formativo de tus alumnos.

Estudiar el Máster en Educación y Docencia en CEUPE

Este programa tiene una duración de 16 meses y 78.7 créditos. El objetivo es que que los docentes adquirieran conocimientos esenciales dentro del proceso de enseñanza y aprendizaje. Así, se aprende sobre el uso de herramientas y nuevas tecnologías, se adquieren destrezas para resolver ciertas problemáticas actuales y se aumenta la empatía con los alumnos.

El máster está dividido en 8 bimestres, de dos materias cada uno. En el temario se abordan cuestiones como teorías del aprendizaje, filosofía de la educación, metodologías para la enseñanza, teoría y desarrollo curricular, diseño de programas de enseñanza y multimedia educativa. También abarca aspectos como elaboración de instrumentos de evaluación, diseño de proyectos de innovación educativa, elaboración de programas por competencia o educación de adultos.

Estudiar un Máster en Educación y Docencia te dará muchas más posibilidades de conseguir un empleo que te guste y te desafíe. Por ejemplo, podrás postular a puestos como gestor educativo, director de instituciones (públicas o privadas), coordinador educativo, promotor educativo o profesor en diferentes niveles y edades. 

Sin duda, con esta formación tendrás muchas herramientas a tu disposición, las cuales te convertirán en un mejor profesor con vistas a futuro pero sin descuidar el presente. No hay que olvidar que la formación continua en el ámbito de la docencia es esencial.