Dirigir un equipo de trabajo no es tarea sencilla. Además de ciertas habilidades innatas, existen diferentes técnicas que pueden ayudar a comunicarse mejor con el grupo y obtener los resultados deseados. Formarse con un programa de postgrado permite adquirir los conocimientos necesarios para gestionar con eficacia el capital humano de una organización.
Hay algunos aspectos fundamentales para conseguir dirigir un equipo de trabajo de forma eficiente y efectiva. Entre ellos, vamos a destacar solo algunos.
Un líder no puede parecer cansado o desmotivado. No importa cuáles son los resultados o los problemas particulares, para dirigir con éxito un equipo es imprescindible mantener una actitud proactiva. Cuando el líder es enérgico, optimista y muestra su compromiso, el equipo será el fiel reflejo de esa actitud.
Un líder no solo habla cuando las cosas no van bien y quiere incentivar a su equipo para que cambie la actitud. También está presente para reconocer los esfuerzos y felicitar por los buenos resultados o ciertos cambios que merece la pena destacar. No hace falta adular, pero sí reconocer cuando alguien hace las cosas bien. Esa persona se sentirá con más ganas de continuar y el resto tomará buena nota.
Para entender este aspecto, es recomendable ver la película El lobo de Wall Street, protagonizada por Leonardo di Caprio. Más allá de la trama, hay que prestar atención a la forma en que el protagonista llama la atención de sus empleados.
Ser firme para lograr los objetivos no es sinónimo de ser agresivo o maleducado con el equipo. No es necesario ser un jefe tirano para que los demás trabajen, al contrario, puede ser contraproducente. Pero tampoco es cuestión de ser demasiado flexible y que el equipo no cumpla con los objetivos. En el equilibrio está la clave.
Si el equipo no mejora, es momento de que ponerse manos a la obra y empezar a trabajar. Quizás lo que al grupo le hace falta es ver al líder en acción. Es esencial recordar esta premisa: “para conseguir resultados diferentes, no puedes actuar siempre de la misma manera”.
Interesarse realmente por los problemas del equipo (a nivel general y también personal) es lo que marca la diferencia. Se debe aprender a comunicar y a explicar lo que se quiere y se necesita de la mejor manera posible. Hay que partir de la base de que los empleados no siempre no saben lo que se busca. Y si se les explica bien, ellos sabrán qué hacer. Es así de sencillo.
Una de las claves para dirigir un equipo es contar con herramientas teóricas precisas y herramientas adaptadas a cada caso en particular. En este sentido, en el CEUPE podrás especializarte en este campo a través de diferentes programas de postgrado.
Por un lado, cabe la posibilidad de cursar un Máster en Dirección y Gestión de Recursos Humanos. Tiene una duración de 9 meses y 60 ECTS y se imparte de manera presencial. También es posible estudiar el máster en línea, en este caso una titulación propia expedida por la Universidad de Alcalá.
Más específico es el Máster en Coaching Integral y Organizacional. Se trata de un título de postgrado con una duración de 24 meses expedido por la Universidad Tecnológica Latinoamericana en Línea y con titulación oficial RVOE.
También es posible adquirir formación a través de cursos como el Curso de Especialización en Dirección Estratégica de Equipos de Trabajo o el Curso de Experto en Gestión Laboral y Recursos Humanos.
Elegir un tipo de formación o programa u otro dependerá de las necesidades y aspiraciones del alumno. En cualquier caso, el CEUPE ofrece siempre programas amplios y actualizados, así como un claustro docente de prestigio y ayudas al estudio.
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