El desarrollo sostenible es un enfoque que surge a partir de la necesidad de plantear soluciones ante problemas que afectan a la humanidad y se traducen, de forma tangible o intangible, en el entorno. Problemas como la degradación del medio, la destrucción de ecosistemas, la pobreza extrema y el agotamiento de recursos.
En las últimas décadas del siglo XX la comunidad mundial empezó a manifestar su preocupación por la situación del planeta y el futuro de la humanidad. Surgieron entonces las primeras voces oficiales que demandaban soluciones a largo plazo para los grandes problemas manifiestos hasta el momento.
Entre las soluciones propuestas el término de Desarrollo sostenible empieza a tomar fuerza, pero no será hasta entrado el siglo XXI cuando se definan los criterios de la sostenibilidad.
El Desarrollo Sostenible
Entender el alcance del término de Desarrollo Sostenible nos permitirá tener una visión global del concepto de Turismo Sostenible, y comprender así la necesidad de integrar el criterio de sostenibilidad a todas las escalas productivas.
Para entender en qué consiste el Desarrollo Sostenible, en primer lugar, vamos a ver algunas definiciones básicas:
- El término sostenible se refiere a un proceso que puede mantenerse por sí sólo.
- El concepto de sustentable hace referencia a la conservación de algo en su ser o estado.
En la literatura especializada en el tema podemos encontrarnos que se hace referencia a Desarrollo Sostenible y Sustentable indistintamente. Se ha discutido mucho con relación al empleo de estos dos términos, llegando a la conclusión que lo sostenible está referido a términos de tiempo, mientras que lo sustentable está orientado en términos de recursos.
El Desarrollo Sustentable se entiende como aquél que satisface las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades. Para trabajar con un solo concepto, a efectos de unificación, trabajaremos con este concepto de Desarrollo Sostenible (sustainable development) de forma integral, abarcando los aspectos de sustentabilidad y sostenibilidad (capacidad de carga y tiempo).
El enfoque de desarrollo sostenible surge a partir de la necesidad de generar propuestas de solución a los impactos generados por sistemas económicos capitalistas, con énfasis en el libre mercado, basados en: la máxima producción, el consumo, la explotación ilimitada e irracional de recursos y el beneficio, como único criterio, de la buena marcha económica. Estos planteamientos han demostrado que son insostenibles e incompatibles con la realidad de un planeta con recursos escasos y limitados, el cual no puede suministrar indefinidamente los recursos que esta explotación exige.
Por ello, ante el agotamiento de recursos y la degradación de ecosistemas, se ha impuesto la idea de que hay que buscar un desarrollo que permita la mejora de las condiciones de vida, pero que sea compatible con una explotación racional de los recursos y con el cuidado del ambiente. Este es el llamado desarrollo sostenible.
La definición de Desarrollo Sostenible fue formulada por primera vez en 1987 en la Comisión Mundial sobre Medioambiente y Desarrollo de la ONU, tal y como sigue: “aquel desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades” (Informe Brundtland).
En función de esta definición el desarrollo sostenible tiene que satisfacer las necesidades del presente, fomentando la actividad económica para que suministre los bienes necesarios a toda la población mundial, priorizando en las necesidades básicas de los países más pobres, y al mismo tiempo debe ser capaz de satisfacer las necesidades del futuro, minimizando los efectos negativos de la actividad económica, de tal forma que la utilización sea racional y sustentable para las próximas generaciones.
El fin principal es la conservación y protección del medioambiente, mientras que sus objetivos prioritarios se centran en:
- Uso racional de los recursos naturales.
- Protección de los ecosistemas mundiales.
Para conseguir alcanzar los objetivos fijados, cuenta con la participación activa de los agentes implicados en el proceso: los ciudadanos mediante los cambios de hábitos y una mayor sensibilización hacia el medioambiente, el ámbito científico que difunde conocimiento y trabaja en la propuesta de soluciones técnicas, y los organismos públicos poniendo en marcha herramientas legislativas y de cooperación internacional.
El concepto de desarrollo sostenible ha ido evolucionando, gracias a su reconocimiento en diversos convenios internacionales, hacia la necesidad de integrar lo ambiental, lo económico, lo social e institucional, adquiriendo un significado multidisciplinario.
En las últimas décadas se ha producido una proliferación de interpretaciones del concepto de desarrollo sostenible, a menudo muy diferente y contradictoria, lo que ha dificultado el paso de las declaraciones de principios a la acción. Por esta razón, el punto de partida de cualquier definición de desarrollo sostenible debe fundamentarse en la dimensión plural del mismo, no limitada a los aspectos ambientales, sino que comprenda también la dimensión económica y la social.
Entonces, se puede hablar de desarrollo sostenible sólo si existe un equilibrio entre los diversos factores que nos permiten satisfacer nuestras necesidades y ayudar a garantizar la calidad de vida. Nos referimos de este modo a las tres dimensiones de la sostenibilidad: ambiental, económica y social. En la confluencia entre las tres dimensiones estaría lo que conocemos como desarrollo sostenible:
- Sostenibilidad del Medioambiente, la capacidad de preservar en el tiempo las tres funciones principales de ecosistemas: la función de proveedores de recursos naturales, su capacidad para recibir y tratar residuos y contaminantes y como fuente de recursos para el mantenimiento de las condiciones necesarias para la vida, lo que implica preservar el capital natural.
- Sostenibilidad Económica, que se refiere a la capacidad de un sistema económico para generar un crecimiento sostenible de los indicadores económicos, en particular, la capacidad de generar ingresos y empleo para el sustento de las personas sin comprometer la capacidad de regeneración de los ecosistemas.
- Sostenibilidad Social, la capacidad de garantizar las condiciones de bienestar humano (seguridad, salud, educación) y su distribución igualitaria en función del género. Es un tipo de sostenibilidad que mantiene la cohesión de una sociedad y su capacidad para apoyar a sus miembros en el trabajo conjunto para alcanzar objetivos comunes, de forma paralela a las necesidades individuales de salud y bienestar, la alimentación adecuada, la vivienda, la expresión y la identidad cultural y compromiso político.
Una visión más completa de la sostenibilidad integra también la dimensión institucional, entendida como la capacidad de asegurar las condiciones de estabilidad, la democracia, la participación, la información, la educación y la justicia.
Desarrollo Sostenible es “aquel desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades” (Informe Brundtland).
Se encuentra en la confluencia entre los tres pilares de la sostenibilidad: Económica, Social y Medioambiental.
Hitos de la sostenibilidad
Para comprender el alcance del término parece adecuado conocer la evolución del mismo, desde los primeros planteamientos del concepto hasta los discursos del momento actual. Son los hitos de la sostenibilidad, los momentos de la historia que han marcado un antes y un después a escala mundial.
El concepto de Desarrollo Sostenible aparece por primera vez en el panorama internacional a través de la denominada “Estrategia Mundial para la Conservación” en 1980. En este documento elaborado por la organización conservacionista Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), aparecía el término de desarrollo sostenido.
En la misma década de los ochenta la ONU creo la Comisión Mundial sobre Medioambiente y Desarrollo, encargándose de la realización de un informe sobre la situación del medioambiente mundial. Al mando de este comité nombró a, la por entonces primer ministro de Noruega, Gro Harlem Brundtland. En 1987 el informe Brundtland definió por primera vez el término de “desarrollo sostenible” tal y como sigue:
“aquel que satisface las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades”.
Años más tarde, en la Cumbre Mundial sobre Medioambiente y Desarrollo (CNUMAD) que tuvo lugar en Río de Janeiro en 1992, en la denominada Cumbre de la Tierra, el concepto comenzó a tomar popularidad. Aparecía entonces un documento básico de referencia, La Agenda Local 21, que se constituía como uno proceso metodológico para poner en marcha el desarrollo sostenible en el siglo XXI.
A raíz de este documento, AL21, se creó la Comisión de Desarrollo Sostenible (CDS) en el seno de la ONU, que, con representantes de todos los Estados, se concentra periódicamente para analizar el estado de cumplimiento de la Agenda Local 21.
Del 26 de agosto al 4 de septiembre de 2002, tuvo lugar en la ciudad sudafricana de Johanesburgo la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible, donde el concepto de sostenibilidad se hizo ya toda una realidad.
En dicha cumbre quedó altamente patente ante todo el mundo cuales son los tres elementos clave de la sostenibilidad: económico, social y medioambiental.
Por su parte, la Unión Europea ha reconocido la sostenibilidad como una tarea y un objetivo que implica a todos: instituciones, empresas, asociaciones, ciudadanos y consumidores, y la necesidad de un nuevo enfoque político preventivo que requiere no sólo nuevos conocimientos sino también nuevos instrumentos económicos, informativos y participativos.