Una revisión salarial se puede describir como "aquel momento en que la empresa puede demostrar con acciones concretas cuánto valora el esfuerzo y la dedicación de su equipo".
Cada cierto tiempo, las empresas revisan los salarios de sus empleados para asegurar una paga justa. Aunque a primera instancia pueda parecer una práctica que beneficia únicamente a los empleados, en realidad también es beneficiosa para las empresas, ya que ayuda, entre otras cosas, a:
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Retener talento clave.
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Mantener altos niveles de productividad.
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Mejorar la calidad del trabajo realizado.
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Estimular la innovación y creatividad.
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Promover bienestar general.
¿Qué es una revisión salarial?
Una revisión salarial es cuando una empresa revisa los salarios de sus empleados para determinar si necesitan ajustes, o en palabras más directas, si es hora de subirle el sueldo a alguien.
Los criterios que se evalúan para este proceso, son:
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Rendimiento del empleado.
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Costo de vida e inflación.
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Capacidad financiera de la empresa.
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Años de servicio y experiencia acumulada por el empleado.
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Comparación con los salarios del mercado.
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Cambios en las responsabilidades del puesto de trabajo.
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Metas cumplidas por el empleado.
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Impacto del empleado en el logro de los objetivos empresariales.
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Equidad interna y política de compensación de la empresa.
Ahora, aunque no es lo más común, una revisión salarial también podría implicar una reducción de sueldo. En tales casos, la empresa puede estar enfrentando problemas financieros o reorganizándose, y decide que es necesario ajustar los salarios hacia abajo para mantener la estabilidad económica o para evitar despidos.
La división encargada de hacer una revisión salarial generalmente es el departamento de recursos humanos (RR.HH.), el cual, en ocasiones, lo hace en colaboración con los directivos de la empresa.
¿Cómo se llevan a cabo las revisiones salariales?
Generalmente, las revisiones salariales son iniciadas por la empresa como parte de su política de recursos humanos y gestión de compensaciones.
Estas revisiones se realizan periódicamente, más comúnmente de manera anual. Aunque también pueden ser ejecutadas como respuesta a cambios concretos dentro de la organización (como promociones, por ejemplo).
La iniciativa de realizar una revisión salarial suele venir del departamento de recursos humanos o de la alta dirección, quienes evalúan varios factores internos y externos para determinar cuándo y cómo se llevará a cabo el proceso. Es importante que estas revisiones sean justas y transparentes, más que nada para garantizar que los empleados sean evaluados de forma equitativa y que se consideren factores como el desempeño individual, la inflación económica y la competitividad del mercado laboral.
En algunos casos, los empleados también pueden solicitar una revisión salarial si sienten que su contribución o sus responsabilidades han aumentado y desean un ajuste acorde a ello. No obstante, en la mayoría de los casos, la decisión final de realizar una revisión salarial y su timing depende de las políticas y estrategias de compensación establecidas por la empresa.