Los diccionarios Oxford definen "ética" de la siguiente manera: "Principios morales según los cuales una persona conduce o realiza una actividad". Así pues, el liderazgo ético significa actuar de acuerdo con sus principios morales en su vida empresarial cotidiana y en los procesos de toma de decisiones.
El liderazgo ético se define como "la expresión de un comportamiento correcto y apropiado a través de las propias acciones, las relaciones interpersonales y la promoción de dicho comportamiento entre los empleados mediante la comunicación, el fortalecimiento y la toma de decisiones en consecuencia". Los ejecutivos éticos son percibidos como dignos de confianza, justos y prudentes.
Intentan transmitir ciertos valores a sus empleados y recompensar específicamente el comportamiento ético. En el cuestionario sobre liderazgo ético, los empleados deben evaluar si su gerente “escucha lo que los empleados tienen que decir”, “solo quiere lo mejor para los empleados” o “es un ejemplo de cómo actuar éticamente”.
Un metaanálisis que resume estudios previos con casi 30.000 participantes muestra que el liderazgo ético funciona. Cuanto más justos dirigen los jefes, más felices son sus empleados y más hacen. Los enfoques tradicionales de liderazgo son incluso superiores al liderazgo ético. Por lo tanto, los directores del estudio aconsejan a los gerentes que confíen más en la confianza y la justicia.
Más rendimiento y satisfacción
El liderazgo ético predijo las actitudes y el desempeño de los empleados. Cuanto más justo lideraban los jefes, más satisfechos estaban los empleados con ellos, más satisfechos estaban los liderados con su trabajo en general, cuanto menos querían dejar la empresa, más motivados estaban, menos dañaban a la empresa y más se desempeñaban.
La confianza en los ejecutivos fue el factor decisivo. La confianza de los empleados en su jefe transmitió el efecto del liderazgo ético en las actitudes y el desempeño. Aquellos que dirigían con justicia eran percibidos como dignos de confianza. Esto motivó e hizo que los empleados fueran más productivos y satisfechos.
El liderazgo ético superó los enfoques de liderazgo comunes. En relación al liderazgo a través de la motivación, a través de recompensas adecuadas, a través de buenas relaciones con los empleados o evitando comportamientos destructivos, el liderazgo ético pudo afirmarse. Predijo las variables objetivo de desempeño, compromiso de trabajo voluntario o comportamiento dañino tan bien o incluso mejor que los enfoques de gestión comunes.
Los ejecutivos deben dar ejemplo de ética
- Thomas Ng y Daniel Feldman resumen:
Nuestros resultados metaanalíticos muestran que el liderazgo ético tiene suficiente validez de criterio con respecto a las actitudes y el desempeño de los empleados y la confianza que los empleados depositan en sus gerentes es la razón principal por la que el liderazgo ético se relaciona con las actitudes y el desempeño laboral.
- Los científicos aconsejan a los gerentes:
- Los líderes empresariales deben tener en cuenta que el liderazgo ético es diferente de los enfoques tradicionales como el liderazgo a través de la motivación o la recompensa.
- Dado que el liderazgo ético a veces incluso funciona mejor que los enfoques de liderazgo tradicionales, siempre debe tenerse en cuenta. También es aconsejable como estrategia adicional junto con los principios de gestión existentes.
- El núcleo del liderazgo ético debería ser generar confianza.
- Un clima general de equidad dentro de la empresa no es suficiente. Los ejecutivos deben dar ejemplo de comportamiento ético y reforzarlo específicamente.
Facetas de comportamiento del liderazgo ético
La siguiente es una lista de las siete facetas de comportamiento del liderazgo ético, clasificadas en orden descendente de importancia (la relación con criterios externos, medida general de liderazgo ético, liderazgo inspirador y gratificante, satisfacción laboral, apego afectivo a la empresa, es menor):
1. Orientación al empleado: este es el factor más significativo para el liderazgo ético. Cuanto más fuerte sea el apoyo de un gerente, más felices y más dispuestos estarán los empleados.
2. Equidad: los empleados reciben un trato equitativo, justo y de acuerdo con los principios. Recompensar el liderazgo conduce a una satisfacción laboral significativamente mayor.
3. Clarificación de roles: definición clara de responsabilidades, expectativas y objetivos de desempeño. La aclaración de roles tiene los efectos más positivos sobre la satisfacción laboral.
4. Integridad: El jefe cumple lo que promete. Sobre todo, un jefe íntegro estimula y motiva a las personas.
5. Poder compartido: los empleados pueden opinar, sus ideas y temores se tienen en cuenta.
6. Orientación ética: El gerente nombra reglas éticas, recompensa si se observan y castiga si no se observan. Esto conduce a un mayor vínculo entre los empleados y su empresa.
7. Interés por la sustentabilidad: La conciencia de sustentabilidad de los gerentes también lleva a un mayor compromiso por parte de los empleados.