La palabra ecología se deriva de las palabras griegas "oikos" para casa o hogar y "logos" para la enseñanza. La ecología es, por así decirlo, el estudio de la casa o el hogar, lo que a primera vista no parece muy informativo.
ecología
Sin embargo, el término casa no es del todo erróneo: porque la ecología considera un ser vivo (ya sea un animal, una planta o incluso una criatura muy pequeña como una bacteria) en su entorno natural, es decir, la ecología no considera al ser vivo aislado de las influencias externas, como es el caso de la biología. La ecología está particularmente interesada en las relaciones con otros organismos y la dependencia de los seres vivos de los no vivos.
Estos seres no vivos también se llaman factores abióticos. Biótico de “bios”, que traducido significa vida, el prefijo "a" significa sin. Los factores abióticos incluyen, por ejemplo, la temperatura, la disponibilidad de luz del sol, el agua, el hábitat o los nutrientes que no son absorbidos por otros seres vivos.
En 1866 Ernst Haeckel dio la siguiente definición de ecología: “la ciencia completa de las relaciones entre el organismo y el mundo exterior que le rodea.”
Sin embargo, para el ecologista Charles Krebs, esta definición era demasiado general e imprecisa. Por lo tanto, formuló una definición diferente: diciendo que la ecología es "el estudio científico de las interacciones que determinan la distribución y la abundancia de los organismos". La abundancia describe la densidad de la población, es decir, cuántos animales o plantas o incluso especies bacterianas se encuentran en un lugar.
Subáreas de la ecología
Con el tiempo, se desarrolló la opinión de que no existe la ecología, pero que el tema era tan complejo que lo mejor era dividirlo en diferentes subáreas. La primera división fue la distinción entre la ecología animal y la ecología vegetal.
La pregunta que también surge: ¿En qué plano se considera a los seres vivos en la ecología? el enfoque puede ser el individuo, una población (un grupo de la misma especie en el mismo lugar y al mismo tiempo), o un ecosistema (una comunidad de diferentes especies).
La visión espacial y temporal también puede ser muy diferente en cuanto a la ecología: algunas criaturas se pueden ver mejor en un espacio pequeño y limitado, mientras que otras están bajo la influencia de contextos más amplios, incluso más globales. Esto último es particularmente el caso cuando se trata del cambio climático, por ejemplo: las corrientes oceánicas y el ecosistema marino también suelen requerir una visión a mayor escala.
Las siguientes subáreas de la ecología, se han desarrollado a partir de las diferentes dimensiones espaciales:
- La ecología del suelo estudia la vida y las interacciones entre los organismos vivos en la tierra.
- La ecología acuática pone especial énfasis en la vida acuática.
- La agroecología se ocupa de la vida en las tierras agrícolas y sus alrededores.
- La ecología urbana se ubica en las zonas urbanizadas y estudia la vida que es viable en las ciudades: en los parques o en los bordillos, en los jardines o en los espacios abiertos. A veces, también se enfoca a las personas.
Esta subdivisión puede ser modificada según sea necesario: partes de la ecología acuática también se pueden denominar ecología fluvial o ecología marina. La ecología forestal o la ecología de las cuevas son también subáreas de la ecología.
La ecología no se mueve en un espacio rígido, sino que examina un objeto de investigación dinámico. Esto significa que los procesos temporales también juegan un papel importante. Por lo tanto, existe una subárea llamada ecología evolutiva, que se encuentra en la interfaz entre la investigación sobre la evolución y la ecología.
La geoecología estudia cómo interactúan los subsistemas abióticos, es decir, las partes inanimadas del medio ambiente, pero también cómo interactúan con las partes animadas.
La ecología del comportamiento se ocupa del comportamiento de los animales y de cómo se ve influenciado por los factores ambientales.
La ecología humana considera las interacciones entre los humanos y el medio ambiente.
La ecología del estrés y de las perturbaciones es todavía un campo de investigación bastante joven. En particular, investiga cómo un ser vivo reacciona a las condiciones ambientales cambiantes o a los factores que interrumpen su vida. Pueden ser temperaturas demasiado altas o demasiado bajas, falta de agua, demasiado o demasiado poco sol, parásitos, depredadores o falta de espacio.
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