A fin de motivar a un empleado para que rinda bien, no basta con pagarle un sueldo. Un empleado necesita algo más para estar satisfecho. Esto se llama salario o remuneración emocional. Suele englobar todas las formas intangibles de incentivos que una empresa ofrece a sus empleados.
El salario emocional
Para que tus empleados te proporcionen un rendimiento adecuado en su puesto, debes acordarte de ofrecerles un salario justo, primas u otros incentivos económicos. Sin embargo, el dinero no es lo único que motiva y satisface a los empleados hoy en día.
La remuneración emocional resulta igualmente importante en este sentido. Por ello, está ganando rápidamente popularidad en el lugar de trabajo actual.
El Dr. Stephen Polmans, profesor de neurobiología y liderazgo estratégico en la Escuela de Administración de Amberes, Bélgica, afirma que la remuneración emocional es un conjunto de beneficios intangibles que una empresa ofrece a sus empleados, y que, además, se idean nuevas fórmulas creativas adaptándolas a las necesidades modernas.
En general, la remuneración emocional motiva a los empleados y permite a las empresas desarrollar y maximizar su talento y habilidades.
Tal y como ya se ha dicho, un empleado motivado y satisfecho no es sólo una cuestión de dinero. Si una persona no se siente cómoda en su lugar de trabajo, es poco probable que se quede en esa empresa.
Criterios fundamentales de la compensación emocional
Dependiendo de la empresa, el salario emocional puede adoptar diferentes formas. Sin embargo, también hay algunos elementos básicos que pueden proporcionar mayor felicidad y satisfacción a los empleados. Entre ellas se encuentran las siguientes:
Un entorno de trabajo satisfactorio y amigable. Un entorno de trabajo próspero y relajado garantizará la comodidad de los empleados y un trabajo en equipo eficaz. Esto depende en gran medida del supervisor. Su tarea es controlar el comportamiento de los empleados y detener cualquier conflicto entre ellos. Recurrir a los servicios de un psicólogo empresarial es una de las formas de gestionar eficazmente las disputas que surgen entre colegas.
Un desarrollo personal y profesional continuo. Es realmente importante proporcionar a los empleados una formación y un desarrollo de habilidades continuos para que se conviertan en verdaderos profesionales. La formación para refrescar viejas habilidades y adquirir otras nuevas es una muy buena manera de motivar a los empleados. Ofrecer a los empleados oportunidades de progreso también puede dar resultados muy positivos.
El hecho de mantener una vida personal, otorgar permisos para visitas al médico o cuestiones personales, un horario de trabajo flexible, permitir que los empleados trabajen desde casa una vez a la semana o conceder permisos para fines específicos son elementos estupendos que deberían considerarse como una compensación emocional atractiva. Un empleado en armonía con el conjunto de su vida es siempre más productivo.
Facilitar el acceso a su voz dentro de la empresa. Escuchar las opiniones de los empleados antes de tomar decisiones es una cuestión muy importante. Son una pieza clave de la empresa después del jefe y sin ellos, nada funcionará adecuadamente. Si el jefe les da la posibilidad de expresarse y se les escucha, los empleados se asegurarán de que lo que dicen realmente importa. Como puede suponerse, este comportamiento puede tener consecuencias realmente positivas. Los empleados que saben que se les valora están motivados para rendir más.
Importancia de la retención del talento
En cierto modo, una buena remuneración emocional es una de las formas más eficaces de retener el talento en una empresa. Por otro lado, también es importante contratar personal idóneo. Al fin y al cabo, cada empresa tiene sus propios requisitos, y si una persona potencialmente contratada no los cumple, no importará lo buena que sea la compensación emocional que le ofrezcas.
Por eso toda empresa debería plantearse cómo es el empleado ideal. Esto también le ayudará a elegir el tipo de compensación emocional adecuada para ese empleado y que este no le cree dificultades con los demás.
El salario emocional consiste en el conjunto de beneficios de carácter inmaterial que la empresa ofrece a sus trabajadores, además de que se adapta a las necesidades del momento actual. También cuenta con criterios básicos para favorecer dicho ambiente como un entorno de trabajo satisfactorio y amigable, el continuo desarrollo personal y profesional, el mantenimiento de una vida personal y el posibilitar espacios en los que el personal pueda expresarse.
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