“Los Estados Financieros principales tienen como objetivo informar sobre la situación financiera de la empresa en una fecha determinada y sobre los resultados de sus operaciones y el flujo de fondos para un determinado período.”
Recomendación leer:
Concepto
Las cuentas anuales, integradas por el balance de situación, la cuenta de pérdidas y ganancias y la memoria, son la base del análisis de estados financieros. No solo son de interés las cuentas anuales cerradas al final del ejercicio económico, sino que también se suele analizar las cuentas intermedias elaboradas al final de mes o cada trimestre.
PERSPECTIVA CONTABLE
El balance de situación es un estado contable que refleja la situación patrimonial de la empresa. Dicha situación patrimonial se compone de los bienes, derechos, deudas y capital que tiene la empresa en un momento dado. Los bienes y derechos integran el activo del balance de situación. El capital y las deudas forman el pasivo de dicho balance.
ACTIVO = PASIVO
Esta igualdad constituye la base del llamado principio de partida doble, en el que está fundamentado todo el proceso operativo de la contabilidad.
PERSPECTIVA PATRIMONIAL O LEGAL
Explica el balance como un conjunto de bienes y derechos y obligaciones pertenecientes a un titular. Esta perspectiva del balance se orienta hacia el cálculo del patrimonio neto, partiendo de una expresión equivalente a la anterior.
El procedimiento permite visualizar con claridad que es posible elaborar un balance de cualquier sujeto titular de derechos y obligaciones, ya sea un particular o empresa.
No obstante, es necesario hacer algunas advertencias en relación con esta visión patrimonialista del balance:
- El neto patrimonial debe entenderse como una medida contable de la riqueza de una empresa en un momento dado. Decimos medida contable porque, tal y como se verá posteriormente existen otras medidas y criterios para la valoración de la riqueza de una empresa.
- Puede inducir a confusión asociar la noción de patrimonio neto con la situación patrimonial de la empresa. La primera constituye un mero cálculo para la determinación de los recursos propios o si se quiere, el valor del activo no comprometido con deuda a terceros. La segunda debe entenderse como un concepto más amplio que contempla y analiza conjuntamente la estructura y la naturaleza tanto de las inversiones, como de los recursos financieros propios y ajenos que ha n posibilitado aquellas inversiones.
PERSPECTIVA ECONÓMICA-FINANCIERA
Desde otro punto de vista, el activo refleja las inversiones que ha efectuado la empresa la empresa, y el pasivo de donde han salido los fondos que han financiado dichas inversiones.
Es esta última perspectiva económico-financiera la de mayor interés para el análisis de los estados financieros ya que lo más relevante para el análisis no es el resultado de una diferencia (Neto patrimonial), sino los componentes de ese cálculo (inversiones y recursos financieros).
El importe total de inversiones de una empresa es necesariamente igual al importe de las fuentes de financiación, propias y ajenas, que posibilitaron aquellas inversiones.
Esta igualdad constituye algo más que un concepto contable, ya que explica de una forma intuitiva y directa una noción clave en la gestión financiera de la empresa: toda decisión en cualquier ámbito o área, que suponga un incremento de los activos de la empresa exigirá una financiación, ya sea con recursos propios y ajenos y, aunque en distinta forma, ambos supondrán un coste de financiación por la retribución de capital.
Debe insistirse que el balance se refiere siempre a un momento del tiempo, a una fecha y en este sentido, ya es tradicional afirmar que el balance constituye una foto de la situación patrimonial. Se trata de una visión estática del patrimonio y, por tanto, los distintos activos y pasivos se representan valores fondo o saldos, y no valores de flujo.
Esta distinción es importante porque a efectos de análisis financiero, los conceptos o variables de un balance pueden también ser calculados como valores flujo. Por ejemplo, si necesitamos estudiar las variaciones de tesorería producidas durante un periodo (entre balances), entonces, el valor de estas variaciones constituye una noción de flujo, refiriéndonos como flujo de tesorería o flujos de caja.
Estructura y principales elementos del balance
El conjunto de partidas que componen el balance de situación de una empresa, está compuesto por bienes, derechos y obligaciones heterogéneos. Por este motivo, y de cara a su presentación en un formato determinado, es necesario establecer un criterio de clasificación y ordenación que facilite la lectura de esta información.
Las partidas de activo normalmente se ordenan atendiendo al criterio de liquidez, expresando por la capacidad que tienen las inversiones de transformarse en dinero, en un plazo de tiempo dado sin pérdida de valor patrimonial. Por otro lado, las partidas que conforman el pasivo se ordenan atendiendo a su exigibilidad y plazo de vencimiento.
La representación gráfica del balance atendiendo a estos criterios de ordenación y clasificación se recoge en el cuadro siguiente.
En este cuadro la ordenación es de menor a mayor liquidez en el activo y de menor a mayor exigibilidad en el pasivo. Este es el formato del Plan General de Contabilidad si bien se trata de una cuestión de preferencias de cara a su análisis.
Hay otros países, como Estados Unidos y la mayoría de los Latinoamericanos, en la que se siguen los mismos criterios de ordenación, pero al revés ya que los activos de ordenan de mayor a menor liquidez y los pasivos de mayor a menor exigibilidad.
También pueden diferenciarse dentro las masas patrimoniales del activo las que son funcionales (imprescindibles para la actividad ordinaria de la empresa) y las que son extrafuncionales (no directamente necesarias para la actividad ordinaria). Por ejemplo, la maquinaria suele ser funcional. En cambio, una empresa que comercializa muebles y tiene unos terrenos con los que no desarrolla ninguna actividad, consideraría a estos como extrafuncionales. Los activos extrafuncionales son los que pueden ser vendidos cuando la empresa necesita liquidez.
Estructura del activo
En función del criterio de liquidez los activos se pueden clasificar en dos grandes masas patrimoniales: activo circulante e inmovilizado.
Estructura del activo
Activo circulante: Lo conforman todas aquellas partidas que normalmente se transforman en dinero en un periodo de tiempo no superior a un año, y está compuesto por los siguientes grandes grupos, clasificados de mayor a menor liquidez:
- Disponible: se incluyen todas aquellas partidas que representan elementos de máxima liquidez y directamente utilizables como medios de pago: caja, bancos, etc.
- Realizable: se incluyen todas aquellas partidas que representan derechos que pueden ser convertidos en dinero en un plazo no superior a un año, y normalmente suelen estar relacionados con el ciclo operativo de la empresa. Algunas partidas importantes son: clientes, efectos a cobrar e inversiones financieras temporales.
- Existencias: son las inversiones en los almacenes de mercaderías (para empresas comerciales), materias primas, productos semiterminados, productos terminados.
Activo fijo o inmovilizado: el inmovilizado lo componen los elementos cuyo plazo de conversión en dinero requiere normalmente más de un año, constituyendo, por lo tanto, inversiones de carácter fijo o permanente.
Las características principales de los elementos de inmovilizado se pueden resumir dos:
- A diferencia de las existencias, los inmovilizados no se adquieren para ser vendidos. Son elementos del patrimonio destinados a servir de forma duradera en la actividad de la empresa. No Obstante, pueden ser vendidos cuando ya no sean necesarios para la actividad.
- Normalmente, suelen utilizarse por un periodo superior a un año.
Las principales agrupaciones del inmovilizado son:
- Material: se incluyen todos los bienes que representan inmovilizaciones físicascomo terrenos, inmuebles instalaciones y otros.
- Financieros: se incluyen todos los derechos que están materializados en activos financieros a largo plazo. (Acciones, participaciones, créditos concedidos, fianzas etc...)
- Inmaterial: lo constituyen elementos patrimoniales intangibles formados por derechos susceptibles de valoración económica que tienen valor indiscutible para la empresa. Las principales partidas que lo componen son I+D, concesiones, patentes, fondo de comercio.
- Gastos amortizables: en esta agrupación se incluyen inversiones que no constituyen bienes o derechos propiamente dichos, sino gastos necesarios para la generación de ingresos en el futuro. Son los llamados gastos de proyección plurianual o activo ficticio. Tiene carácter intangible como el inmovilizado inmaterial y su separación de estos últimos obedece más bien a un criterio arbitrario. No obstante, debe reconocerse que una característica común de estos gastos amortizables consiste en que se trata de elementos o conceptos que no se pueden ver de forma individualizada. La partida más típica de los gastos amortizables está constituida por los denominados gastos de establecimiento.
Estructura del pasivo
La estructura y ordenación del pasivo se ha realizado atendiendo al criterio de exigibilidad.
De acuerdo con este criterio, las partidas que conforman el pasivo se pueden clasificar en dos grandes agrupaciones; recursos propios y recursos ajenos.
Recursos ajenos: Se incluyen todas las partidas que suponen obligaciones frente a terceros (no propietarios). Los recursos ajenos también se definen como pasivo exigible. Las distintas partidas que conforman los recursos ajenos se clasifican a su vez en función del plazo de vencimiento.
Atendiendo a esta clasificación adicional, los recursos ajenos se pueden agrupar en dos grandes masas patrimoniales: pasivo circulante y deuda a largo plazo.
- Pasivo circulante: Se incluye todas aquellas partidas que representan obligaciones cuyo plazo de vencimiento no sea superior a doce meses, entre las que cabe destacar: proveedores, efectos a pagar, créditos y préstamos y otros.
- Deuda a largo plazo: se incluye todas las partidas que representan obligaciones cuyo plazo de vencimiento sea superior a un año. Entre las partidas más típicas se puede mencionar obligaciones créditos, préstamos y otros acreedores. Al igual que en el activo, la parte de las deudas a largo plazo cuyo vencimiento sea en los próximos doce meses se ha de registrar en el pasivo circulante.
Estructura del pasivo
Recursos propios: están constituidos por los recursos aportados por los propietarios de la empresa o generados por ella.
Las partidas más importantes:
- Capital: Aportaciones de los propietarios o accionistas
- Reservas: Son partidas de beneficios que no han sido distribuidas, ni incorporadas al capital. Las partidas más típicas son: reserva legal, estatutaria y voluntaria.
- Resultados de ejercicios anteriores: representan resultados de ejercicios anteriores no aplicados a reservas o otros fines. Algunas partidas significativas son: remanente, resultado negativo de ejercicios anteriores, etc..
- Resultados del ejercicio: representa el saldo neto de las operaciones de ingresos y gastos habidas en el ejercicio.
Continuación...