Las organizaciones sin fines de lucro son grupos que se enfocan en proporcionar servicios y soluciones para el bienestar de la sociedad, sin tener como objetivo principal el beneficio económico. Sin embargo, esto no significa que estén exentas de cumplir con ciertas obligaciones legales, incluyendo el pago de impuestos.
Si bien existen algunas exenciones fiscales en función de la finalidad de la organización, el tamaño y la ubicación geográfica, las organizaciones sin fines de lucro, a menudo, están sujetas al pago de ciertos tipos de impuestos.
Las organizaciones que están legalmente registradas como entidades sin ánimo de lucro suelen recibir un tratamiento fiscal diferencial, lo que significa que pueden estar exentas de la mayoría de los impuestos a nivel federal, estatal y municipal.
Sin embargo, deben cumplir con algunos impuestos básicos, como los impuestos al consumo sobre las ventas que realizan o los impuestos sobre la nómina que pagan a sus empleados. Las organizaciones sin ánimo de lucro que generan ingresos de actividades comerciales también están sujetas a ciertos impuestos, como el impuesto sobre las ganancias.
Ahora bien, existen también otro tipo de organizaciones que son catalogadas como “exentas de impuestos”. Estas organizaciones son comúnmente conocidas como organizaciones “sin fines de lucro” o “exentas”, y estas básicamente no pagan ningún tipo de impuesto al gobierno. Pero aquí cabe aclarar que estas organizaciones no tienen como finalidad generar ingresos para sí mismas o para sus individuos asociados, sino que se dedican exclusivamente a causas sociales como la caridad, la educación, atención médica, y otros objetivos asegurar el bienestar social.
¿Entonces? ¿Pagan impuestos las organizaciones sin fines de lucro?
La respuesta es depende, ya que las organizaciones sin ánimo de lucro pueden estar exentas de impuestos en algunos casos y en otros no. En general, si la organización está registrada como una entidad sin ánimo de lucro ante las autoridades fiscales y cumple con ciertos requisitos, puede ser elegible para la exención fiscal.
Sin embargo, esto puede variar según el país y la legislación fiscal de cada lugar. Además, es importante destacar que la exención de impuestos puede no ser total y existen ciertas obligaciones fiscales a las que estas organizaciones deben cumplir.
Ejemplos de si las entidades no lucrativas deben o no pagar impuestos
Algunos ejemplos de organizaciones sin ánimo de lucro que deben pagar impuestos son:
- Una asociación deportiva sin ánimo de lucro que organiza eventos deportivos para financiarse y genera ganancias a través de la venta de entradas, productos promocionales, patrocinios, etc. En este caso, la asociación deberá pagar impuestos sobre las ganancias obtenidas.
- Una fundación que ofrece servicios de consultoría a empresas y cobra por sus servicios. En este caso, la fundación deberá pagar impuestos sobre los ingresos que obtenga por la prestación de sus servicios.
Por otro lado, algunos ejemplos de organizaciones sin ánimo de lucro que están exentas de pagar impuestos son:
- Una ONG que trabaja en proyectos de ayuda humanitaria en zonas de crisis. En muchos países, este tipo de organizaciones están exentas de pagar impuestos sobre las donaciones que reciben y sobre los proyectos que realizan.
- Una asociación cultural que realiza actividades para promocionar la cultura local y no recibe ingresos por ello. En este caso, la asociación puede estar exenta de pagar impuestos si cumple con ciertos requisitos fiscales específicos en su país.