Hoy en día, en un entorno empresarial cada vez más competitivo, el lean manufacturing se ha consolidado como una herramienta fundamental para mejorar la productividad y la rentabilidad de las organizaciones.
Mediante la eliminación de actividades que no agregan valor, aunado a la búsqueda constante de la excelencia operativa, este enfoque permite a las empresas identificar y atacar los desperdicios en sus procesos de manera altamente efectiva.
¿Qué significa el “lean manufacturing”?
El lean manufacturing es una metodología de gestión que busca reducir todo lo que no es necesario en el proceso de fabricación de un producto. Esto se hace con el objeto de reducir costos de producción, disminuir plazos de entrega, mejorar la calidad del producto final y aumentar la satisfacción del cliente.
Características del lean manufacturing
-
Orientado hacia la eliminación del desperdicio en todas sus formas, incluyendo la sobreproducción, inventario excesivo, tiempos de espera y transporte innecesario.
-
Centrado en la mejora continua, mediante la identificación de oportunidades de mejora y su implementación a través de pequeños cambios incrementales.
-
Basado en la participación activa de todos los miembros de la organización, fomentando la colaboración y el trabajo en equipo para la resolución de problemas y la toma de decisiones.
-
Enfocado en la satisfacción del cliente, mediante la entrega de productos y servicios de calidad, en el momento adecuado y al costo más bajo posible.
-
Fundamentado en la gestión visual y la estandarización de procesos, con el fin de facilitar la comunicación, mejorar la visibilidad de las operaciones y asegurar la consistencia en la ejecución.
6 herramientas ampliamente utilizadas en el lean manufacturing
-
Just-in-Time (JIT): Es un enfoque que busca producir y entregar los productos o servicios en el momento justo en que son requeridos por el cliente, evitando la acumulación de inventarios y minimizando los costos asociados. Se basa en una planificación precisa y una estrecha colaboración entre proveedores y clientes.
-
Kaizen: Es una metodología japonesa que busca la mejora continua en todos los niveles de una organización. A través de reuniones periódicas, los equipos identifican oportunidades de mejora y proponen soluciones para optimizar los procesos y eliminar desperdicios.
-
Poka-yoke: Son métodos o dispositivos a prueba de errores que se utilizan para prevenir o detectar fallos en los procesos. Estos dispositivos ayudan a evitar defectos o errores de manera proactiva, evitando así “retrabajos” o “reprocesos” que generan desperdicios.
-
Kanban: Es un sistema visual de gestión de inventarios que ayuda a controlar y planificar la producción. Utiliza tarjetas o señales visuales para indicar la necesidad de reponer los materiales en cada etapa del proceso, evitando así el sobreabastecimiento y reduciendo los tiempos de espera.
-
Valoración del flujo de valor (VSM): Es una herramienta que permite analizar y visualizar de manera holística el flujo de producción, identificando los cuellos de botella y los desperdicios. Con esta información, se pueden tomar decisiones para optimizar el flujo y mejorar la eficiencia.
-
5S: Se trata de una metodología de orden y limpieza que busca optimizar el entorno de trabajo, eliminando elementos innecesarios y asegurando una disposición lógica y eficiente de los recursos.
Los desperdicios en el lean manufacturing
En el lean manufacturing, los desperdicios se definen como todas aquellas actividades que no aportan valor al producto o servicio final. Veamos algunos de ellos:
-
Sobreproducción: Cuando se produce más de lo necesario o antes de ser requerido por el siguiente proceso.
-
Espera: Tiempos de inactividad en los que los productos, personas o materiales están parados sin ser procesados.
-
Transporte innecesario: Movimiento innecesario de materiales o productos dentro de la línea de producción o entre diferentes áreas.
-
Procesos innecesarios: Actividades que no agregan valor al producto final y pueden ser eliminadas o simplificadas.
-
Inventarios excesivos: Mantener un exceso de materiales o productos almacenados, lo cual genera costos adicionales y posibles obsolescencias.
-
Movimiento innecesario: Desplazamientos físicos que no contribuyen al proceso de producción.
-
Defectos: Productos o servicios que no cumplen con los estándares de calidad establecidos, lo cual significaría un desperdicio de recursos o la inversión de procesos extras para reacondicionarlos.
-
Subutilización del talento: No aprovechar el conocimiento y habilidades de los empleados en su máxima capacidad, limitando su aporte.