Si nos basamos en la definición estricta, la comunicación corporativa es el conjunto de operaciones destinadas al público externo de una empresa o una institución. También incluye la información brindada a los propios empleados dentro de la compañía.
En el mundo actual, donde impera lo digital, no podemos dejar de lado la comunicación interna y externa. Es una de las claves para conseguir las metas de la empresa y cumplir con las estrategias fijadas. Si no se informa correctamente, ni los trabajadores pueden realizar los procesos con eficacia ni los clientes pueden comprar los productos con confianza.
Comunicación corporativa, más que publicidad
Hoy en día la publicidad no es la única herramienta que tenemos a nuestra disposición para lanzar un mensaje al mercado. La comunicación corporativa, también llamada comunicación integral, da lugar a la imaginación, pero también al compromiso que se debe adoptar como empresa. Y de ella depende en buena medida la reputación de la compañía en el mercado.
¿Cómo se puede elegir con éxito el mejor canal de comunicación externo? Todo depende del target del público y del servicio o producto que se ofrezca. Hay varias vías de las que se puede servir la comunicación corporativa: las redes sociales, las relaciones públicas, el patrocinio, las ferias y los anuncios convencionales, entre otras.
De esta manera, la comunicación corporativa se ha convertido en una herramienta más que estratégica para informar a los clientes (potenciales y actuales) sobre aquello que ofrece la empresa. Y no se trata solo de productos o servicios, también de aspectos como la fiabilidad o la responsabilidad.
No hay duda de que una buena comunicación es sinónimo de mayores ventas y exposición. ‘Estar en la mente del público’ es lo que se busca cuando se hace publicidad. Eso derivará, por supuesto, en que compren los productos o servicios en el momento adecuado. Pero para conseguirlo, la imagen que transmite la empresa es también muy importante.
Cómo llevar a cabo la comunicación corporativa
Posicionar un producto o una empresa no es una tarea sencilla, requiere de planificación y de probar diversas técnicas. ¿Cuáles? Aquellas que se se han aprendido y que dan resultado a la competencia, por ejemplo. Saber qué demandan los consumidores es también esencial.
Ya que la comunicación corporativa debe estar alineada con los objetivos de la empresa, esta ha de ser un fiel reflejo de sus estrategias. Es decir, que si como plan estratégico se ha decidido invertir en publicidad, no se puede luego utilizar ese dinero en otras cuestiones. Los planes de comunicación exitosos están basados en tres aspectos:
- Definir la identidad corporativa (objetivos y principios)
- Conocer qué imagen se tiene de la empresa
- Determinar la imagen que queremos conseguir, es decir, la ‘ideal’
Una vez que se ha profundizado en estos aspectos, es momento de definiciones. Es imprescindible marcar los objetivos de comunicación para transformar la imagen, así como crear una estrategia de medios y mensajes y un calendario de costes y acciones. Y dentro de esas acciones, en un mundo digital como el nuestro, es imprescindible utilizar las herramientas que ofrecen Internet y las redes sociales, pero eligiendo medios y herramientas en función del público al que se quiere llegar.
¿Dónde aprender de comunicación corporativa?
La comunicación corporativa debe quedar en manos de expertos en relaciones públicas y marketing. Estos profesionales tienen la capacidad para reforzar la labor del departamento de ventas, supervisar acciones puntuales de promoción, estar al tanto de las últimas novedades en cuanto a publicidad, establecer contactos con empresas o personajes públicos que pueden promocionar los productos u organizar eventos corporativos, entre otras funciones.
El Centro Europeo de Postgrado (CEUPE) y la Universidad de Alcalá ofrecen un Máster en Social Media & Community Management. Un máster online con una duración de 12 meses. Permite al alumno aprender todo sobre la aplicación de diferentes técnicas dentro del mercado digital, analizar informaciones de las redes sociales e Internet, trabajar como content manager, aplicar estrategias de contenido digital y manejar las herramientas digitales más innovadoras del mercado actual.
Dentro del temario, además, se incluyen apartados específicos sobre sobre ecosistema digital, creatividad y diseño en los medios digitales, planificación estratégica y social media y tecnología y desarrollo de contenidos. También hay espacio para abordar la innovación empresarial, desarrollo de negocios originales, analítica y social media optimization (SMO), monitorización y métricas y marketing de buscadores (SEM, SEO y analítica web).
Al finalizar el máster serás capaz de utilizar todas las herramientas actuales en la estrategia de publicidad y comunicación corporativa de una empresa. Además podrás diseñar, planificar y hacer seguimiento de las diferentes campañas publicitarias y mejorar la imagen de las compañías.