El efecto látigo es el fenómeno por el que los cambios en la demanda al final de la cadena de suministro provocan fluctuaciones en las existencias a lo largo de la misma. A menudo, las pequeñas fluctuaciones de la demanda en el nivel del comprador o del vendedor se reflejan en la cadena, causando grandes discrepancias.
Esto, a su vez, hace que se compren demasiados o insuficientes productos de consumo en cada nivel de la cadena. Estas mercancías suelen acabar malogradas, retrasadas o con considerables reducciones de precio para evitar su pérdida total.
Causas del efecto látigo
Existen varias causas del efecto látigo en las cadenas de suministro. En muchos casos, la falta de una previsión adecuada de los cambios en la demanda de los clientes, los plazos de entrega y el seguimiento de las existencias son factores importantes.
Estas son las causas más comunes del efecto látigo:
Problemas de plazos de entrega
El plazo de entrega es uno de los aspectos más importantes de la gestión del inventario y repercute directamente en su capacidad para satisfacer las necesidades de los clientes. Calcular los plazos de entrega y planificarlos en consecuencia garantiza que se eviten las pérdidas y que se puedan cumplir los pedidos. Sin embargo, si hay un problema en algún punto de la cadena de suministro, los plazos de entrega aumentan para cada paso restante. Esto dificulta la satisfacción de la demanda de los clientes y provoca grandes fluctuaciones en los niveles de inventario.
Problemas de plazos de entrega
Una de las causas más comunes del efecto látigo es la falta de intercambio de información, tanto a nivel interno como en la cadena de suministro. Compartir información sobre los cambios en la demanda, los problemas de producción y las próximas ventas es clave para prevenir problemas. Esto es especialmente importante si estás interesado en lo que es el 3PL o dropshipping para el fullfilment del comercio electrónico. En este caso, su capacidad para cumplir con los pedidos depende totalmente de mantener un buen flujo de información.
Previsiones incorrectas de la demanda
La previsión de la demanda es compleja y requiere el establecimiento y el análisis de una amplia gama de KPI (Key performance indicator) clave y KPI de inventario de comercio electrónico. Cualquier error puede dar lugar a previsiones inexactas. Esto, a su vez, conduce a la incapacidad de satisfacer la demanda o a un exceso de producto obsoleto. También hay muchos factores externos que pueden hacer que su previsión sea incorrecta. La clave es realizar auditorías periódicas del inventario, revisar y actualizar las previsiones
Demasiados descuentos y promociones
Además, otro problema que suele provocar un efecto látigo es el exceso de promociones o el abuso de descuentos. Esto se debe a que alteran las tendencias de la demanda en general y dificultan las previsiones. Los proveedores se acostumbran a atender los pedidos a un ritmo elevado, y esto puede convertirse rápidamente en un problema cuando las ventas terminan y vuelven las tendencias estacionales. Si tiene problemas habituales de exceso de existencias, intenta agruparlas. Esto le permite vender productos ineficientes agrupándolos con otros productos de mayor calidad. El margen de beneficio es mayor y no afectará a la cadena de suministro.
Cinco pasos para evitar el efecto látigo
Debido a que el efecto látigo puede causar tantos problemas en la gestión del inventario, la clave es poder minimizar dicho fenómeno. Aunque hay algunas causas sobre las que no se puede influir, pero sí se puede limitar la probabilidad de que tu empresa sea parte de la causa.
Estos son cinco pasos que puedes seguir para minimizar el efecto del látigo:
1. Utilizar un software de gestión de inventarios
Una gestión adecuada del inventario y de los pedidos contribuye en gran medida a evitar problemas con el efecto látigo. La mejor manera de hacerlo es con un software que permita seguir los niveles de existencias, los flujos de productos y los pedidos en tiempo real, como un Sistema de gestión de pedidos (OMS). Esto proporciona datos útiles y una visión detallada de la capacidad para satisfacer la demanda. Además, puede ayudarte a establecer niveles nominales, calcular los puntos óptimos de reordenación y evitar el desperdicio de dinero en el almacenamiento excesivo de inventario.
2. Limitar las promociones y las ventas
Muchas empresas creen que deben realizar promociones frecuentes para aumentar la demanda. Este método de venta es peligroso en muchos sentidos y puede provocar fácilmente pérdidas tanto para la empresa como en todas las fases de la cadena de suministro. Procura utilizar los periodos de descuento sólo cuando sea necesario para satisfacer las expectativas de los clientes. En su lugar, céntrate en las ventas adicionales y en la venta cruzada para aumentar el valor promedio de los pedidos e incrementar las ventas de forma sostenible.
3. Optimizar la cadena de suministro
A medida que la cadena de suministro se va llenando de numerosos proveedores y piezas móviles, es más fácil que se produzcan errores. Trata de acortar tu cadena de suministro y optimizar tus procesos de pedido para limitar este riesgo. También facilita mucho el mantenimiento de las relaciones y el intercambio rápido de información.
4. Mejorar la planificación de los pedidos
La planificación de pedidos es el protagonista olvidado de la gestión de inventarios. Recopilar todos los datos posibles sobre los niveles de existencias y las tendencias de la demanda para pedir la cantidad óptima de cada producto. También debes tener en cuenta las existencias de seguridad necesarias y las próximas rebajas o los cambios estacionales de la demanda. El uso de un software de planificación de la demanda es una excelente manera de optimizar la planificación de los pedidos.
5. Optimizar la cantidad mínima de pedido (OMS)
Establecer un volumen mínimo de pedidos es una buena manera de evitar la pérdida de mercancías en la entrega. No obstante, intenta evitar añadir descuentos por volumen a tu OMS, ya que esto puede atraer a clientes que pidan más de lo que puedas manejar. Esto puede causar muchos conflictos en tu equipo de cumplimiento de pedidos y provocar cambios drásticos en tus niveles de inventario.
El efecto látigo es el desafortunado resultado de una mala gestión de la cadena de suministro y de la previsión de la demanda. Siguiendo estos consejos y manteniéndote al día de las últimas tendencias, podrás evitar cualquier inconveniente.
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