El cambio organizacional es el acto de hacer ajustes o mejoras en la forma en que una entidad funciona.
Concepto de cambio organizacional
El cambio organizacional es un proceso (gradual o radical) mediante el cual una entidad modifica sus métodos, estructuras, tecnologías o cultura.
Gradual significa que el cambio se produce de forma progresiva, paso a paso, a lo largo de un período de tiempo, sin alteraciones abruptas o repentinas en la organización.
Por otra parte, radical es cuando los cambios son drásticos dentro de la organización, pudiendo afectar profundamente sus operaciones, estructuras y cultura en un período de tiempo muy corto.
Es destacable mencionar que, cuando un cambio organizacional es radical, es más probable que los empleados muestren resistencia hacia él. Es decir, es más probable que los empleados se sientan inseguros, ansiosos o preocupados por cómo afectará el cambio a sus roles, responsabilidades y rutinas establecidas.
Causas del cambio organizacional
Son muchas las causas por las que una entidad puede emprender un cambio organizacional. Algunas de estas, pueden ser:
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Para expandirse a nuevos territorios o líneas de negocio.
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Para reducir costos y mejorar la rentabilidad.
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Para adoptar nuevas tecnologías.
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Para mejorar la calidad de los procesos.
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Para mejorar la experiencia del cliente.
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Para emplear prácticas más sostenibles y reducir el impacto ambiental.
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Para mejorar la comunicación interna y externa de la empresa.
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Para alinear la entidad a las nuevas estrategias empresariales establecidas.
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Para mejorar la calidad de vida laboral de sus empleados.
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Para expandir su presencia en línea.
Podrían ser muchas más, ya que cada organización tiene sus propias razones para llevar a cabo un proceso de cambio organizacional.
Características de un cambio organizacional
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Suele ser el resultado de una estrategia deliberada para mejorar el funcionamiento de la organización.
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Supone cambios en múltiples áreas de la organización, coordinados para lograr un objetivo común.
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Frecuentemente surge como respuesta a cambios en el entorno externo o para aprovechar nuevas oportunidades.
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Requiere una comunicación clara para asegurar que todos los miembros de la organización estén informados y alineados con los cambios propuestos.
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Se monitorean continuamente los cambios implementando para medir su efectividad y realizar ajustes si es necesario.
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A veces, implica cambios en los valores, creencias y normas compartidas dentro de la organización.
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Requiere de una figura líder para acompañar a los miembros de la organización durante el proceso de cambio.
Desventajas del cambio organizacional
Un proceso de cambio organizacional puede traer consigo varias desventajas a tener en cuenta:
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Puede haber resistencia al cambio por parte del personal de trabajo. Esto significa que puede existir oposición de las personas dentro de una organización ante cualquier cambio propuesto
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Durante un período de cambio, los empleados pueden necesitar tiempo para adaptarse a las nuevas formas de trabajar, pudiendo resultar en una disminución temporal de la productividad.
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Algunos empleados pueden optar por dejar la organización si no están de acuerdo con los cambios implementados o si sienten que no encajan en la nueva dirección de la empresa.
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Frecuentemente, los cambios organizacionales provocan tensiones entre diferentes grupos dentro de la organización. Esto puede deberse a preocupaciones sobre la redistribución de recursos, la pérdida de poder o la competencia por roles y responsabilidades en la nueva estructura organizativa.
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Los cambios organizacionales generalmente llevan tiempo para mostrar resultados tangibles. Durante este período de transición, es posible que la incertidumbre sobre si los cambios están funcionando según lo planeado cause ansiedad entre los empleados y la dirección.
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Un proceso de cambio organizacional puede ser costoso debido a los diversos recursos y esfuerzos que se necesitan para implementarlos y gestionarlos adecuadamente.