En recursos humanos, el análisis de puestos es un método estructurado que permite a las empresas saber exactamente qué están buscando cuando contratan a alguien para ese puesto.
Concepto de análisis de puestos
El análisis de puestos es un proceso riguroso que implica estudiar una determinada posición para entender qué habilidades y conocimientos se necesitan para llevar a cabo las actividades profesionales asociadas con ese puesto.
El objetivo fundamental de este análisis es encontrar el candidato ideal para cada posición.
Características principales
Cuando se realiza un análisis de puestos, el enfoque principal está en comprender la naturaleza del puesto en sí mismo, más que en las habilidades, la experiencia o la personalidad del individuo que ocupará ese puesto.
En otras palabras, el análisis se centra en el puesto como una entidad independiente de la persona que eventualmente lo ocupará.
Esto se debe a que los puestos en una organización pueden ser ocupados por diferentes individuos a lo largo del tiempo, y es esencial que el puesto esté claramente definido y estructurado independientemente de quién lo ocupe.
Ahora, esto no quiere decir que el trabajador no sea importante. Por el contrario, el análisis de puestos ayuda a garantizar que se encuentren candidatos adecuados, con las capacidades necesarias para desempeñar eficazmente el trabajo. Una vez que se comprenden los requisitos del puesto, se puede evaluar si un candidato tiene lo que se precisa en términos de habilidades y experiencia para desempeñar el rol de manera exitosa.
Beneficios para la empresa
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Ayuda a definir qué se espera de cada empleado en su determinado puesto, ayudando así a evitar confusiones sobre quién es responsable de qué tarea.
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Los gerentes toman decisiones más precisas en cuestiones de contratación, promoción y asignación de proyectos. Asimismo, pueden alinear de mejor forma los objetivos individuales de los empleados con la estrategia general de la organización.
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El análisis de puestos revela cómo se relacionan los diferentes roles dentro de la empresa y si la estructura organizativa actual es eficiente, o si por el contrario, necesita ajustes.
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Ayudar a reducir los costos asociados con la rotación de personal y el bajo rendimiento (que podrían suceder por contrataciones erróneas).
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Permite detectar sectores donde se necesita contratar nuevos empleados o desarrollar talento interno para cubrir futuras necesidades de la organización.
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Facilita la preparación de posibles sucesores para roles determinantes dentro de la organización.
Beneficios para el trabajador
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Los empleados experimentan menos estrés y confusión, ya que entienden cabalmente lo que deben hacer.
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Son más productivos en sus actividades laborales.
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Tienen la oportunidad de acceder a programas de capacitación que son diseñados concretamente en base a sus destrezas particulares.
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Se vuelven más adaptables a los cambios que pueden surgir en el entorno laboral.
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El personal de trabajo comprende mejor los roles que tiene cada uno de sus colegas, lo que aumenta la efectividad del trabajo en equipo.